Niño Torero Marcos Ortega
Etapas de Torero
Me dio mucho miedo porque vi a los toros muy grandotes desde la Plaza Mas Bella de México.
Mi Padrino Raymundo Morales me compro mi primer capote en la plaza de toros.

Mi papa y mi tío el de Tijuana, fueron novilleros, Orteguita El Fotógrafo y Antonio Ortega Montes. A mi siempre me gustaron los toros.

Un día se me presento la oportunidad, cuando iba en tercer año de primaria; Yo había toreado de salón en los festivales que hacia en la escuela, y me echaba las grandes faenas en las reuniones en mi casa y ganaba mi dinero por brindar mis faenas.
Cuando ¡¡¡ DIOSITO ME ECHO EL CAPOTAZO!!! para torear la primera vez, en la Escuela Fray Martin de Valencia donde yo estudiaba el Padre Jorge Durán Pineiro dio un festival taurino para beneficio de la escuela porque le faltaba dinero para arreglarla, que era una escuela de paga, que voy y le digo al padre.
¡¡¡¡YO QUIERO TOREAR!!!!!
El padre me contesto: ¿Cómo? Si tú no eres Torero!!!!!

yo iba a torear en el cortijo un 13 de septiembre, Nos íbamos a entrenar con un primo que también era novillero en ese entonces Lucio Ortega, mis hermanos Angel Ortega y José Luis Ortega, llegábamos al Parque Calles que era la casa de Don Ramón Acosta un gran artista en tocar la guitarra y componer instrumentos de cuerda, todo un Bohemio un gran Maestro y mis grandes amigos hasta la fecha Alfredo, Paquiro, Rodolfo Acosta y su familia.
Y así fue como toreé la primera vez, pero lo más bonito fue, O sea, que la primera vez que yo Toreé fue VESTIDO DE TORERO, me prestó el traje Don Ramón Acosta, el papá de Paquiro Acosta, un zanahoria con pasamanería era un traje de mi gran amigo Paquiro Acosta. O sea, eso para mi fue lo máximo de la vida, y gracias a Don Ramón.
Se llegó la alegría de un ser humano como yo, por ser torero y vestirme de torero que para mí ha sido lo más maravilloso de la vida.

Creo, vestirme de torero era transformarme en un monstruo porque así me sentía como torero chiquito, porque fue lo que me gusto siempre y con el miedo que también tenía como todos los toreros, yo quería saber esa emoción de vestirme de torero y hasta la fecha no lo puedo explicar, me pregunto de ese medio día en que me vestí de torero, me transforme en un hombre grande, en una persona con responsabilidad, en una persona con miedos y algo que empezaba y que iba a amar toda mi vida.

Yo entrenaba y veía muchas cosas nuevas en la plaza de toros.

Pero al estar frente al toro, me salía el torero que quería y que soy, y la emoción fluía, el toro a mí siempre me gusto, y fue mi amo, siempre que había toros, era una cosa, que no entendía con que felicidad y con que gusto podía torear y seguir toreando No me cambiaba por nadie, cuando estaba vestido de torero o estaba toreando.
O sea creo que todos los toreros tenemos miedo, y en esa época a lo mejor yo tenía más miedo, pero Yo no le veía al toro si daba cornadas o no daba cornadas, o sea, yo lo que quería era seguir toreando y seguir toreando.
Y así comencé a torear y toreé muchas veces de niño torero…….

¡¡¡ TOREAR ES, ES LO MAS PADRE QUE HAY EN LA VIDA!!!

Son muchos, muchos momentos, que me traen grandes recuerdos más que nada creo que al CORTIJO, le debo mucho, fue parte de mi vida toreando, y cuando fui torero, con Don ANGEL INSUNZA. Pero creo que por lo que se vino esto fue por el Padre Jorge Pineiro, que me dejo torear mi primer festival, cuando me vi con mi primer animalito…. Ahora lo veo y estaba chico.. pero para mí estaba muy grande y para mí fue muy emocionante, fue algo, algo especial, porque fue vestido de torero, no hay palabras para expresarlo, creo que la persona que como torero la primera vez que se vista de torero es muy impresionante. 

Toreé muchos festivales de niño torero, Apizaco, Huamantla, Teziutlán, Martínez de la Torre, casi todo Tlaxcala lo estuvimos recorriendo.
Mi Padre el Sr. Antonio Ortega Montes, quería lo mejor para su hijo, y luego la afición surgió en sus otros dos hijos, el conocía a un Sr. que se llamaba Rafael Osorno que había triunfado en la Plaza México con un novillo que indulto y se llamaba Minico, mi Padre lo trajo para que entrenáramos con él. Y si nos sirvió, y le agradezco los conocimientos de ese gran torero.

Ya no quiero hablar más ahorita de esto, porque yo quiero mucho, mucho a la fiesta y lo que he vivido de aquí para allá, para seguir recordando y seguir contando mis travesuras taurinas.
Síganme leyendo para decirles que yo he querido mucho a la fiesta y que de ella sigo aprendiendo y de ustedes mismos, falta mucho que contar de todas mis experiencias, y seguiré hablando de esto.

Le dije a mi papá que no tenía con que torear y que yo quería ser torero, Mi papa me llevo con Don Ramón Acosta, él tenía pulque y mi padre le dijo que le traía una botella y le dijo: no hay necesidad, dime que quieres y te traigo lo que quieras, mi padre le contesto, sólo vengo a molestarte porque mi hijo va a torear y necesita un traje para que se vista de torero y me acuerdo que le dijo:
¿Y SABE TOREAR?
y mi padre igual le contesto,
SI NO, NO TE LO VENIA YO A PEDIR!!!!!.
Ellos son mi familia Acosta, porque además han toreado conmigo muchas veces, gran familia torera y
OOOLEEE¡¡¡ POR DON RAMON ACOSTA
Al Sr. Pedro Rodríguez Chema, fue la primera persona y empresario, que me llevo a la primera ganadería que yo pise, se llamaba Conejo Chico, ahí toree una becerra y me pego en un testículo, me abrió y me echaron limón para detener la sangre, y me ardió, ¡¡¡Cómo me ardió!!! YA, O SEA. Recuerdo mucho esa tarde por todo lo que paso emocionalmente siendo yo un torero chiquito.

Y con esto no quiero hacer un libro, quiero decir y demostrar que los toreros se hacen con gente, como mi padre; pero también con gente como Macareno.
Macareno hacia banderillas. Pero era un hombre que ejecutaba 60 u 80 quites, Primero era amigo de mi padre, el nunca me cobro un centavo y era un hombre que vivía de su trabajo, de hacer banderillas. Pero no por hacer banderillas, no era un gran hombre y un gran torero.
Mis respetos para Macareno. A él le debo muchas tardes en España, que hice quites que él me enseñó, un gran maestro. Que Dios te tenga en tu santa gloria, y te conceda las orejas y rabo allá en el cielo.
A toda la familia Isunza, en especial a Don Ángel Isunza y su hermano Carlos Isunza, Rosita, y mis compadres Ángel y Blanca Isunza, los voy a querer toda mi vida.
A Don Ángel lo voy a admirar por esa afición por la fiesta, por ese apoyo incondicional que a mí me brindo sin que mucha gente sepa de eso, pero fue un personaje amigo de mi Padre, fue un núcleo que a mí me apoyo a Don Ángel mi admiración y respeto igual que a su hermano Carlos, que en toda mi vida no tendré como agradecerles que creyeran en mí. Toda la gran familia Isunza, los voy a amar toda mi vida.

En esos festivales alternaba con los aficionados prácticos, como fueron Don Jesús Arroyo y Sr. Lalo Ascué entre muchos más, y también con grandes maestros y figuras del toreo, desde el maestro Lorenzo Garza, el Maestro Silverio Pérez, El Maestro Jorge El Ranchero Aguilar, El Soldado y muchos toreros más que no se me vienen a la mente.

Esta experiencia se la debo a Luis Ortiz, y el sabe porque fui torero y porque tuve esas agallas para enfrentarme con quien fuera, porque así era él.
Al Dr. Alberto Narváez de la Gran Plaza La Florecita que fue un escaparate para mi, mi agradecimiento a él y a toda la familia Narváez a su esposa Florecita y a sus hijos, que también los conocí por que Luis Ortiz Me llevo.
En otra ocasión a las 2 o 3 de la mañana estábamos toreando, en los Estudios Churubusco con los hermanos Almada, hasta ese grado llego Luis Ortiz conmigo, esto no lo podré olvidar nunca, por lo que reitero mi admiración y cariño para siempre.
También un agradecimiento a su familia Ortiz Gámez por el cariño y apoyo que me dieron.
Próximamente mas agradecimientos a:
Dr. Alberto Narváez, Maestra nati, Mis abuelos Margarito Ortega y Rafael García, Lila wipper, Carlos González , Francisco Cerezo, Los Hermanos Bravo, Sr. Mercado, Sr. Retana, Torero de Canela, Miguel Ortas, Claudio Peduzzi, Porfirio Maldonado
Niño Torero Capitulo 2
Niño Torero Capitulo 1
Niño Torero Capitulo 3